Para los vascos, la Navidad ha sido siempre uno de los m�s amados d�as de fiesta del a�o. Teniendo a la familia entera cerca para tener juntos la cena de Navidad, nuestros villancicos y nuestras antiguas costumbres, como el Olentzero, han sido siempre el centro de la celebraci�n, la cual nosotros, como vascos que somos, vivimos con gran intensidad. Para el pueblo vasco la Navidad significa festivales "par excellence". Hoy en d�a como en el resto del mundo, la Navidad se ha hecho muy consumista, pero en Euskadi es m�s que s�lo eso. Es la reflexi�n de la historia de un pa�s, con tradiciones que han sido transmitidas por nuestros ancestros, y las cuales todav�a permanecen en casi todas las familias de Euskadi.

El �rbol de Navidad es todav�a una de las referencias clave alrededor de este tiempo en Euskadi. Nuestros padres todav�a pueden recordar cuando la madera estaba siendo reunida en el oto�o, la manera en la cual el mejor �rbol era llevado completo a casa.

La costumbre todav�a queda. Ahora no hay necesidad de arrastrar el �rbol hasta la casa, pero en muchos hogares de todo Euskadi un pino o un �rbol de Navidad decora los apartamentos y las casas. Es un �rbol t�pico del norte de Europa, pero un �rbol el cual tambi�n refleja el respeto que los vascos tienen hacia el "�rbol de Navidad".

Pero sin duda, la tradici�n que est� m�s profundizada en el Pa�s Vasco es el "Olentzero" o el hombre de carb�n. En la v�spera de Navidad, virtualmente a trav�s de todas los pueblos de Euskadi, la figura de un pastor o un hombre de carb�n es levantado, sentado en una canasta, sobre los hombros de gente que lo lleva de casa en casa a trav�s de toda la ciudad o villa, y en todas las casas por donde pasa, los j�venes que acompa�an a el Olentzero se detienen para cantar un villancico.

En Navarra, por ejemplo, el Olentzero es un hombre de carb�n quien viene bajando de las monta�as para repartir casta�as y vino, y por supuesto, presentes para los peque�os.

El Olentzero es un personaje m�tico vasco, es un mensajero, un pastor quien grita que es la Navidad a trav�s de los lugares m�s rec�nditos del Pa�s Vasco. Pero no es s�lo un pastor; en algunas partes de Euskadi es un granjero y en otras es un hombre de carb�n, pero todos ellos comparten el hecho de traer buenas noticias.

Pero el Olentzero tambi�n ha sido asociado con muchas otras creencias, como la tradicional cocina vasca. En Salvatierra, �lava, por ejemplo, el Olentzero es un hombre de carb�n, quien despu�s de haber vivido una ardua vida arriba en las monta�as, regresa a su pueblo para traer buenas noticias y al mismo tiempo para disfrutar de un buen banquete que acabe con el hambre que ha sufrido.

Este personaje m�tico tiene cabeza grande, est�mago grande y de acuerdo a las tradiciones locales, es capaz de tomar diez "arrobas" (una arroba es alrededor de veinticinco libras de peso) de vino. En Hondarribia, aparte de traer una pipa, un cap�n, algunos huevos y un bote de vino, usualmente tiene una cola hecha de bacalao, y si un Olentzero permanente es erigido en el pueblo, una barbacoa es usualmente puesta junto a �l donde las sardinas son repartidas gratis a los espectadores.

Los villancicos tambi�n constituyen una parte importante de las festividades. La idea es que los villancicos representen un saludo alegre, el cual es llevado de casa en casa donde un verso es dedicado a una familia entera o a un miembro en especial. Est�s canciones todav�a son interpretadas en todas las familias vascas.

Tomado de Euskal Etxeak 6-7, p�gina 11.

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